Lesiones cervicales por deporte

En el mundo de los deportes de contacto, como rugby, hockey o baloncesto, una lesión común es la lesión en el plexo braquial (Stinger). Esta lesión ocurre cuando la cabeza o el cuello (columna cervical) se golpea a un lado haciendo que el hombro tire en la dirección opuesta. Mientras la Stinger se presenta con mayor frecuencia durante la escuela secundaria, puede ocurrir en todos los niveles deportivos.

¿Cómo puede suceder un Stinger?

Una Stinger es causada por un estiramiento de los nervios del plexo braquial. Estos son nervios periféricos que salen de la médula espinal y corren a través de los hombros, debajo de la clavícula, y en los brazos. Los nervios del plexo braquial son responsables de dar fuerza y sensibilidad a los brazos. Como resultado de un golpe en el costado, por la fuerza en la cabeza o un golpe en el hombro mismo, estos nervios pueden ser comprimidos, estirados o irritados.

¿Cuáles son los síntomas de una Stinger?

Un choque lateral de este tipo causa dolor inmediato e intenso, así como una sensación de hormigueo o sensación de ardor en el cuello que corre por el brazo y los dedos. También es común tener debilidad en el brazo afectado o en la mano.

¿Cómo se trata una Stinger?

La mayoría de las lesiones de este tipo se resuelven espontáneamente, después de un período de descanso. Los atletas, generalmente, se abstienen del deporte hasta que se hayan retirado los síntomas. Compresas de hielo en el cuello o los hombros, medicamentos anti-inflamatorios, masajes y ejercicios de fortalecimiento de cuello son a menudo parte del tratamiento. Los jugadores, en la mayoría de los casos, pueden retomar su deporte una vez que el dolor haya desaparecido y que hayan recobrado movimiento, fuerza y sensibilidad en el cuello y los brazos.

Los síntomas persistentes o recurrentes pueden indicar presencia de una lesión más grave. En esos casos, pueden ser necesarios Rayos X en el cuello, una tomografía computarizada o resonancia magnética, a fin de descartar otras enfermedades graves con síntomas similares.

¿Cómo puede prevenirse una Stinger?

El fortalecimiento de los músculos del cuello es una forma de prevención importante para los atletas que quieren evitar este tipo de lesiones. En los deportes de contacto es también importante utilizar la técnica adecuada. Los equipos de seguridad que limitan el movimiento hacia atrás, tales como rollos para el cuello, también pueden ayudar.

Lo más importante es que los jugadores que experimenten síntomas de una Stinger deben informar inmediatamente a sus entrenadores o al médico del equipo, a pesar del riesgo de ser eliminados del juego. Ignorar los síntomas o jugar con ella puede conducir a lesiones más graves.